miércoles, 28 de septiembre de 2011

La paradoja de la dificultad

Dos páginas de la guía incluida
La semana pasada acabé Machinarium (sigo jugando Super Mario Galaxy). El final no es nada espectacular, me recordó el final de Doukutsu Monogatari [Cave Story] pero con menos melancolía, en sí el juego no tiene tanta potencia sentimental como su increíble dirección artística nos haría creer.
Lo que sí me dejó meditabundo mientras veía la congelada pantalla final es la insatisfacción personal que sentí. No porque crea que el juego no valió la pena, me atacó un arrepentimiento diferente.

¿Nunca han acabado un juego basándose en una guía? O ¿nunca han revisado cómo pasar determinada sección porque nomás no logran decifrarla? Al menos una vez ¿no? Ahora ¿alguna vez se arrepentido por hacerlo?

Hoy en día, en plena revolución digital, nuestra paciencia es más poca, nuestra ansiedad se desata con facilidad. En los ochentas y noventas cuando uno no lograba pasar determinada parte en un juego no le quedaba de otra más que seguir pensando cómo hacerlo, a lo mejor preguntarlo a un conocido que ya había acabo el juego, o bien tener la suerte de encontrar una revista que trajera la ayuda necesaria. En pleno 2011 todos sabemos que en la red abundan walkthroughs, trucos y secretos en general. Entonces, cuando uno se atora no titubea mucho en considerar agarrar la computadora más cercana y consultar la forma desatorarse.

Esta es una guerra invisible de voluntad. Todos queremos obtener la satisfacción de atravesar un juego de principio a fin armados solamente con ingenio y habilidad, el problema es que queremos hacerlo a el ritmo que nosotros decidamos, sin tener que pararnos por ratos o semanas con determinada sección en la cabeza antes de lograr conquistarla.

Es muy gracioso además, como un nivel complicado desata nuestras más contradictorias creencias.
Estás jugando, te trabas, piensas, sigues trabado, intentas, sigues trabado, despotricas, sigues trababo. Es justo en este instante cuando el sentimiento paradójico ataca. Es en este momento en el que piensas que el juego es absurdamente difícil, que está mal diseñado, que no pinchen mamen con sus jaladas. Quizá es la manera en que nuestro subconsciente justifica tu mediocridad, también justifica poner pausa mientras vas a la computadora a apoyarte en la sabiduría ajeana.

Ese candado fue el que me derrotó
Lees cómo, te das cuenta lo simple que era, te das topes, suspiras, vuelves y lo pasas. El problema es que el fantasma del arrepentimiento no te soltará nunca, desearías haberte exigido más, sabes que tenías la capacidad de lograrlo, sabes qué superpoderoso te habrías sentido. Pero no fue así, joteaste y nada cambiará eso.


En Machinarium todo este embrollo aplica más rápidamente dado que el juego mismo trae una guía de sí mismo. Para acceder únicamente a la correspondiente del segmento en el que estás necesitas pasar un minijuego, de esa manera uno lo piensa dos veces antes de rendirse y recurrir a esta ayuda. Toda la méndiga paradoja me sucedió varias veces con la susodicha guía, ya que está incluida uno puede considerar que no es trampa y el sentimiento de autotraición puede achicarse. Por suerte.
El problema es que requerí al internet dos veces para acabar Machinarium (lo sé, soy vil). No me arrepiento de una de esas dos veces porque era acerca de un acertijo musical, en el que debía recordar un secuencia de 7 notas en determinado orden y repetirlas. Sé que pude haberlo logrado, pero habría tenido que usar fuerza bruta y poco ingenio, además de mucho tiempo, pues la verdad mis aptitudes musicales son bastante pocas.
De la segunda vez que mariconeé sí me arrepiento gachamente. La cosa es que ya era el meritito final y mi ansiedad por terminar el juego ya era mucha.
Y como les platico, primero sentí que la vida se me iba en resolver ese condenado acertijo y cuando descubrí cómo resolverlo me sentí pendejísimo.



5 comentarios:

El pato Bonavides dijo...

Lee la guía walkthrough:

-AAAH, HABIA QUE APRETAR "START" CUANDO EMPIEZA?

Es dificilisimo no sucumbir ante la tentación de leer la guía cuando te trabás. Solo un caballero jedi es capaz de mantener su voluntad.

El pato Bonavides dijo...

jaja son años de oficio(?) es que utds en México también tuvieron una infame versión de chiquititas, Debe ser por eso! Una vez que los ves se graba en el cerebro el chufa chá

Alandroide dijo...

Pffff! La verdad es que resident evil 2 y 3 los terminé con guía en mano, no sé si haya sido malo, pero no me arrepiento porque aún así me divertí; y esa debe ser la MAYÚSCULA en los juegos.

Alejandro Godínez dijo...

Don Alandroide: deberías de intentar jugar Silent Hill 3 en el nivel 13 o Silent Hill 4 en el máximo nivel.

Christian O. Grimaldo dijo...

Tienes razón, la parte en la que usaste la guía era muy fácil.

Concuerdo contigo en el caso de las guías, esa incertidumbre de antes ante los juegos difíciles me da nostalgia.

Me gusta tu nuevo blog ;)